Las tecnologías de la información y la comunicación, nos habilitan a diseñar en el espacio áulico una nueva manera de concebir el proceso de enseñanza y aprendizaje.
El desafío plantea a la comunidad educativa reubicar su función educativa y socializadora, promoviendo la inclusión digital.
Las alternativas Tics nos ofrecen un marco regulatorio de promoción de espacios virtuales de enseñanza aprendizaje donde conectividad, interactividad, aprendizaje activo, interdependencia positiva y responsabilidad colaboran a reducir la brecha digital y educativa.